Carlos sigue en coma y Laura, incansable, pasa, como siempre, la noche a su lado contándole como le ha ido el día. Le cuenta que dos chavales menores, que se dedicaban a dar tirones desde un coche, provocan un espectacular accidente en el que se ve involucrado un coche de policía.
Uno de sus ocupantes, una mujer, sufre una disección de la médula y se queda parapléjica, lo que está a punto de dar al traste con sus planes de futuro. Sin embargo, los chicos parecen no ser conscientes de las consecuencias de sus actos y Héctor les abrirá los ojos.
También le cuenta el caso de una mujer embarazada que, lamentablemente, pierde a su hijo durante el parto. Laura y Maca ayudarán al marido para que su mujer sea capaz de aceptar lo sucedido. Ester, muy afectada por esta pérdida, sufrirá una pequeña hemorragia que la alarmará mucho. Maca no dudará en estar a su lado y recuperar su relación.