La historia comienza cuando Amelia descubre que está embarazada de su novio, Luis Alejandro Montero. Amelia está llena de ilusiones y ve su embarazo como una oportunidad para casarse con su novio, al que ama con locura. Pero Luis Alejandro tiene otros planes, ya que ha decidido casarse con Marisa Gómez Ruiz, heredera de un poderoso imperio de la banca y las finanzas.
Pedro logra convencer a Amelia de no dar a la niña en adopción apelando a su derecho de padre legal de la criatura por ser su esposo. Por su parte, Luis Alejandro se entera que Marisa no puede tener hijos y, aunque no se lo confiesa, él está molesto y decepcionado porque Marisa le haya ocultado un asunto tan importante antes del matrimonio.
Luisa Fernanda conoce al médico que la va a atender en el hospital, que no es otro que Carlos Eduardo, y enseguida queda prendada de él. Carlos Eduardo inmediatamente detecta que la historia de la amnesia es falsa, pero se divierte llevándole la corriente.
Luisa Fernanda le pide a Carlos Eduardo que la ayude a salir del lío en que se metió y él comprende, divertido, que ella es sólo una chiquilla atrapada dentro de una de sus propias travesuras. Pero en la casa de Luisa Fernanda, Amelia, su madre, se entera del accidente y descubre aterrada que el hombre a quien su hija pretende demandar no es otro que Luis Alejandro Montero.
Carlos Eduardo sorprende a su padrastro besándose con otra mujer, Consuelo, y se lo reclama fuertemente. Luis Alejandro trata de explicarle que la mujer se le abalanzó inesperadamente, pero Carlos de nuevo le dice que es un mantenido de su madre, que sólo la quiere por su dinero y que a él nunca lo ha engañado.
Luis Alejandro no reconoce a Amelia, y le pide que lo deje en paz, y esto deja una enorme herida en ella, porque muy en el fondo, Amelia pensaba que esa era la oportunidad para recuperar el amor de su juventud.
Carlos Eduardo consigue a Luisa Fernanda enfrente de su casa y la aborda para ofrecerle disculpas y darle explicaciones acerca de lo ocurrido, pero ella lo rechaza con aparente ira. No obstante, los ruegos de Carlos Eduardo dan resultado y ella finalmente acepta pactar una tregua e ir a almorzar con él.
Carlos Eduardo le confiesa a Luisa Fernanda que siente algo muy especial por ella, y le dice que lo que más le agrada es que es una chica espontánea, genuina y muy natural y que por eso ha comenzado a enamorarse de ella, Amelia y Pedro tienen una nueva discusión.
Carlos Eduardo le explica a Luisa Fernanda que todo se trata de una invención de Augusto para salir con ella, pero que él no está interesado en Vanesa y que la única mujer que le interesa es ella. Vanesa y Augusto están muy extrañados con la actitud de Luisa Fernanda y Carlos Eduardo, mucho más cuando ambos regresan del baño y deciden dar por terminada la reunión en el café.
Consuelo llega a la casa de Amelia, que está feliz con la visita de su hermana, después de tantos años. Amelia le cuenta de sus sufrimientos, de su encuentro con Luis Alejandro y de la demanda que Luisa Fernanda intenta en contra de él, pero Consuelo le pide que no llame más a su casa la que don Fernando, su padre, todavía siente mucho odio por ella.
Carlos Eduardo le declara su amor a Luisa Fernanda y ella está feliz, pero a la vez preocupada porque cree que la madre de Carlos no aceptaría una relación de su hijo con la hija del jardinero.
Amelia sorprende a Luisa Fernanda despidiéndose de Carlos Eduardo con un beso, y después de armarle un escándalo, la obliga a entrar a la casa a golpes. Ya dentro de la casa Luisa le cuenta toda la verdad sobre su noviazgo con Carlos Eduardo y las razones de todas sus mentiras.
Luisa Fernanda le presenta Carlos Eduardo a su padre y a Pedro le parece un buen hombre, pero le preocupa el hecho de las diferencias sociales y así se lo expresa. Carlos Eduardo le asegura que él y su familia están libres de todo prejuicio y le pide que confíe en él, ya que ama a Luisa Fernanda y sus intenciones son honestas y serias.
Vanesa le asegura a Luisa Fernanda que en la cena de esta noche Carlos Eduardo y ella van a anunciar su compromiso a todos y Luisa Fernanda se retuerce de celos y rabia, pero tiene que disimular delante de su amiga.
Vanesa le confiesa a Luisa Fernanda que ha descubierto que Carlos Eduardo la engaña y que tiene otra novia. Luisa Fernanda piensa que Vanesa se está refiriendo a ella y llama a Carlos Eduardo que, a su vez, se encuentra en el departamento de Jennifer.
Carlos Eduardo le aclara a Vanesa que él no está enamorado de ella y que todo fue un plan de Augusto para salir con Luisa Fernanda, ya que a ella no le permiten salir sola con un muchacho. Esta monta en cólera y Luisa Fernanda la consuela sin confesarte que el verdadero amor de Carlos Eduardo es ella misma.
Rigoberta decide ir a ver a Luis Alejandro para decirle lo que ella piensa se merece por haber abandonado a Amelia y a su hija hace años y ahora tener el valor de prestarse para buscarlas. Este trata de defenderse, pero Rigoberta le hace ver que es un cobarde y mala persona..
Amelia se percata de que el esposo de su jefa es el mismo hombre que la abandonó años atrás, se contraria mucho, pero decide no dejar su trabajo. Vanesa acude a ver a Carlos Eduardo para seducirlo, pero este la pone en su lugar y le aclara que está enamorado de su novia y que ella no tiene oportunidad con él.
Jennifer chantajea a Luis Alejandro para que la ayude a recuperar a Carlos Eduardo, este le ofrece las pruebas para que finja un embarazo. Mariza le asegura a Carlos Eduardo que su relación con Luisa Fernanda no va a funcionar por sus diferencias sociales.
Al despedirse de Carlos Eduardo, Luisa Fernanda trata de entablar conversación con Mariza, pero esta, aunque educada, se muestra seca y cortante. Andreina le reclama a Jennifer su traición al revelar su secreto respecto a quien es su amante, pero esta aparte de amenazarla con delatarla con Mariza, le niega que haya dicho cosa alguna.
Jennifer le dice a Carlos Eduardo acerca de su embarazo y lo primero que le viene a la mente a éste último es que se trata de una treta de Jennifer para atraparlo. Pero ella se ha preparado muy bien y no sólo tiene resultados de pruebas falsas sino que realiza una actuación que termina por convencer a Carlos Eduardo.
Marisa le pide a su hijo que cumpla con su responsabilidad y se case con Jennifer, pero Carlos Eduardo le contesta que está dispuesto a asumir su compromiso como padre del niño que va a nacer, pero eso no significa que volverá con Jennifer, porque a quien ama es a Luisa Fernanda.
Carlos Eduardo está sorprendido y molesto por la presencia de Jennifer en el acto de graduación. Él piensa que ella está allí para contarle a Luisa Fernanda sobre su embarazo, pero ella lo niega y aduce que sólo está para acompañar a su hermana Carolina.
Luisa Fernanda está molesta con Carlos Eduardo por no haber ido a su acto de graduación. Este le explica que tuvo una emergencia con un paciente pero Luisa no le cree. Carlos Eduardo respira Aliviado cuando se entera Luisa Fernanda cree que Jennifer es una abogado que trabaja para Luis Alejandro y no teniendo el valor de decirle la verdad.
Jennifer comenta sobre su embarazo delante de Augusto y éste se emociona y felicita a Carlos Eduardo por la noticia. Carlos le reprocha el hecho a Jennifer, pero esta le responde que no ocultará su embarazo a nadie y que Luisa Fernanda se enterará por terceros ya que el no es lo suficientemente valiente para reconocerlo delante de esta.