10 valientes solteros, de muy diferentes y carismáticos perfiles, han aceptado el reto de casarse sin conocer a su futura pareja hasta el día de su propia boda. Se conocerán en el altar y, tras un mes de convivencia, decidirán si siguen adelante con su unión Los espectadores serán testigos de la primera vez que se vean, de sus bodas, del momento en el que conocen a sus familias y de los sentimientos de alegría, humor, emoción, tristeza y nervios por los que atraviesen Marian Frías, Silvia Sanz y Rubén Turienzo componen el grupo de expertos que han estudiado la compatibilidad de los candidatos y que les guiarán durante su primer mes de convivencia.
Pedro y Mónica y Jonathan y Sabrina inician sus respectivos matrimonios celebrando junto a sus familiares el reciente enlace. Mientras que Alexia, la amiga de Pedro, continuará intentando captar la atención del novio, lo que provocará desencuentros con Mónica, entre Jonathan y Sabrina surgirá un entendimiento muy natural, a pesar de que, en este caso, será la madre del novio la que tendrá reticencias, al no estar convencida de que este matrimonio sea una buena idea. Pero Sabrina sabrá bien jugar sus armas de mujer para conquistar, no solo a su marido, con el “picardías súper bonito” que ha elegido para la ocasión, también a su suegra, pese a que las críticas hacia su nueva nuera vayan a más… Ambas parejas vivirán su noche de bodas y su primera noche juntos, que les servirá para acercar posturas sobre cómo ha afrontado cada uno de ellos la ceremonia y el banquete posterior. En este punto, Pedro y Mónica amanecerán tras una primera noche en la que han exprimido la ocasión al máximo y su relación ha cobrado una nueva dimensión… El espectador también conocerá la identidad de dos nuevas parejas compatibles según el test del programa verificado por los expertos Marian Frías, Silvia Sanz y Rubén Turienzo. Se trata de la primera pareja de gays que pasa por el altar de ‘Casados a primera vista’ y otra formada por dos amantes de los animales. Los espectadores conocerán a las nuevas parejas del programa y serán testigos de sus bodas, no siempre del gusto de todos los asistentes. De hecho, en una de las ceremonias se vivirán grandes momentos de tensión por parte de los invitados e incluso la figura de la ex volverá a planear sobre el ambiente. Contra viento y marea y motivados por el amor ¿Serán capaces de darse el “sí quiero”?.
Cristina y Tito serán la última de las parejas en darse el “sí quiero”. Aunque desde un primer momento habrá feeling y mucha atracción entre ellos, pronto surgirán las reticencias de la hermana de Tito, la cual no está nada convencida de que Cristina sea suficientemente buena para su hermano. Por otro lado, ocho de los solteros dispuestos a casarse a primera vista ya se han atrevido a dar el gran paso: Mónica y Pedro, una relación entre los reproches y la pasión; Sabrina y Jonathan, una pareja que ha conectado desde el primer momento a pesar de las desavenencias familiares; José Ramón y Alberto, la primera pareja gay que se casó sin conocerse; y Andrea y Bernardo, protagonistas de un enlace lleno de dudas. El lunes, Andrea y Bernardo llegan al banquete de su boda donde la novia vivirá más de una situación incómoda, y comprobaremos las diferencias entre sus entornos y familias. Por su parte, en el caso de José Ramón y Alberto, tras vivir una ceremonia muy emotiva, es el momento de disfrutar del convite, rodeados de sus familias, entre las cuales se generará desde el principio gran complicidad, a pesar de ser unos completos desconocidos, y surgirá un entendimiento de una forma muy natural. Ambos vivirán ante las cámaras su primer momento de pasión. Mientras tanto, Sabrina y Jonathan descubrirán el destino de su luna de miel, lo que les llevará a viajar a Marrakech, ¿sabrá Sabrina tanto de francés como ella afirma? Mónica y Pedro también iniciarán su viaje de novios, pero en este caso, la gallega será quien decida el destino: Mérida (Yucatán, México).
Hace pocas horas desde que las parejas se han visto por primera vez en el altar, y ya están disfrutando de sus respectivas lunas de miel. En la cuarta entrega de Casados a primera vista, Sabrina y Jonathan continúan su idílico viaje de novios en Marrakech. La compatibilidad entre la pareja es una realidad que salta a la vista y entre ellos se mantiene la complicidad que presenciamos el día de su boda. Sin embargo, la luna de miel no será tan dulce para Andrea y Bernardo. Durante su primer desayuno como marido y mujer, descubrirán el destino de su viaje: Nueva York. Las calles de “la gran manzana” serán testigo de las desavenencias entre la pareja, a la que le resulta complicado llegar a un entendimiento. Mientras, José Ramón y Alberto amanecen por primera vez como recién casados cuando el destino de su luna de miel les sorprende: Paris. Recorrer la ciudad que visitan será un buen punto de partida para conocerse un poco más y afianzar una relación con mucha química. En Mérida (Yucatán, Méjico), los constantes reproches de Mónica y sus peticiones de cómo le gustaría que Pedro fuera con ella empiezan a generar dudas en su marido. Sin embargo, Mónica empezará a relajarse y ambos comenzarán a disfrutar de su recién estrenado matrimonio. En la Riviera Maya, Cristina y Tito despiertan tras su noche de bodas. Los intentos de Tito por impresionar a Cristina parece que no darán mucho resultado. A pesar de los acercamientos que tendrá la pareja, la desconfianza de Cristina, unida al atractivo de Tito, parecen impedir que la relación avance. Sin embargo, la pareja vivirá una situación que despertará los celos de Cristina, lo que le hará darse cuenta de los sentimientos que tiene hacia Tito. Durante la última noche en sus respectivas lunas de miel, cada pareja de recién casados deberá tomar una decisión crucial en la relación: decidir en qué ciudad inician la convivencia.
Mónica y Pedro son los primeros en iniciar su convivencia sabiendo que no va a ser un camino fácil para ninguno de los dos, sobre todo porque Pedro no se mostrará muy dispuesto a prescindir de su independencia por nadie. Además, la pareja recibirá la visita de los amigos de Pedro, entre los cuales estará otra de las exnovias del arquitecto, algo que no sentará muy bien a Mónica. Mientras, Sabrina llega a Alicante cargada de ilusión para comenzar su vida de casada. Veremos si en el pequeño apartamento de Jonathan propicia que surjan los primeros conflictos en la pareja. Jonathan organiza una comida familiar que supondrá el reencuentro de Sabrina con su suegra, algo que preocupa a Jonathan, pero no tanto a la salmantina, que está dispuesta a ganarse a la madre de su recién estrenado marido. En Madrid, tras la idílica luna de miel de Alberto y José Ramón, este último se enfrenta a la vida en la gran ciudad, algo a lo que no está muy acostumbrado. Sin embargo, la química que existe desde el primer momento entre ambos hará que sus primeros días de convivencia la relación vaya sobre ruedas. Tito abandona Cádiz con la esperanza de que Cristina, en su ciudad natal, esté más receptiva con su relación. Sin embargo, la actitud de la catalana hará que Tito se moleste. Pero la visita de su madre y su hermana hará que el gaditano recobre fuerzas para proseguir con la conquista del corazón de Cristina. En la relación de Andrea y Bernardo los problemas han estado presentes desde el principio. Aún así, ella ha cedido y hace efectiva la mudanza. Sin embargo, la pareja amanece un día más en camas separadas. Sus problemas de convivencia se complican y la relación se dirige hacia un callejón sin salida. Para intentar superar sus diferencias, recibirán en Asturias la visita de la experta Silvia Sanz, que tratará de ayudarles a acercar posturas. Una vez más, la pareja intentará poner todo de su parte. Sin embargo, los roces de la convivencia hacen q
La convivencia comienza a generar los primeros problemas entre las parejas. En la sexta entrega de ‘Casados a primera vista’, los desencuentros entre Andrea y Bernardo continúan, lo que provoca que ninguno de ellos quiera seguir apostando por la relación y Andrea se marche de Oviedo. En este momento de tensión, la pareja recurrirá de nuevo a Silvia Sanz, la psicóloga del programa, para tratar de encontrar una solución. Sin embargo, en Alicante Sabrina y Jonathan siguen encontrando puntos en común en las situaciones más cotidianas. Sus familias, que cada vez están más contentas con el enlace, se reúnen con ellos en una comida donde se producirá el reencuentro entre las suegras y continuará despertándose el feeling entre sus respectivos hermanos. Pero los celos se despiertan en Sabrina, que comienza a desconfiar de Jonathan. En Madrid, Mónica se va a encontrar de nuevo con Alexia, una situación incómoda para ella pero que aprovechará para hacerle las preguntas pertinentes, algo que no le gustará a Pedro. Los recién casados mantendrán una conversación y Mónica se derrumbará al conocer la opinión de Pedro acerca de su recién estrenado matrimonio. La psicóloga y sexóloga Marian Frías les visitará para ayudarles a superar sus problemas, y les animará a realizar actividades en pareja. Cristina y Tito en Barcelona, siguen luchando por su relación. Una tradicional comida catalana con la familia parece ser el inicio para intentar limar asperezas, pero las diferencias entre la hermana de Tito y Cristina son cada vez más notables. Silvia Sanz, la psicóloga del programa, visitará a la pareja para ayudarles a reconducir su relación. Cristina empezará a estar un poco más relajada y la relación avanzará un paso más. Mientras, José Ramón y Alberto continúan disfrutando de su vida de casados. José Ramón sorprenderá a su marido con un plan diferente para alejarse de la gran ciudad, descargarán toda su adrenalina volando por las altur
Las cuatro parejas que continúan embarcadas en la aventura lo hacen en situaciones bien diferentes en la séptima entrega de ‘Casados a primera vista’. Mónica y Pedro no pasan por su mejor momento: las exigencias y el afán controlador de la gallega están acabando con la paciencia de su marido. Tito lucha por su relación con Cristina, pero los continuos desplantes de la catalana y su poca predisposición a que el matrimonio funcione han conseguido que el gaditano se replantee si su esfuerzo merece la pena. En la aparente idílica relación de José Ramón y Alberto han aparecido algunas sombras relacionadas con los celos del murciano y el inminente viaje a Londres de su marido. Sabrina y Jonathan, por su parte, han sabido sobrellevar los pequeños problemas de la convivencia, y afrontan su relación con una actitud muy positiva. Ha llegado el momento de que todas las parejas hagan un alto en el camino para compartir una experiencia que hasta ahora habían estado viviendo como única, con el resto de recién casados que participan en el programa. Por fin podrán intercambiar impresiones con otras personas que están en su misma situación. Será una entrega llena de sorpresas y confidencias en la que cada pareja pondrá en común con el resto sus miedos y frustraciones, así como las claves de un buen funcionamiento del matrimonio. Seremos testigos de las opiniones de unas parejas sobre las otras y de conflictos y acercamientos inesperados. Durante el encuentro de parejas, Mónica no tardará a sacar los trapos sucios de Pedro; Tito y Cristina tendrán un acercamiento importante en la discoteca; Sabrina se enfadará muchísimo con Jonathan hasta ponerle en un compromiso y José Ramón se planteará divorciarse de Alberto. Además, las parejas se separarán por primera vez y pasarán un día los chicos por un lado y las chicas por otro. Cuando se reencuentren, tendrán muchas cosas que decirse y quizá algunas que preferirían no contar..
En la octava entrega de ‘Casados a primera vista’, después del encuentro con el resto de parejas, los recién casados volverán a sus respectivas ciudades para retomar la convivencia. Tras el enfado y la amenaza de divorcio de José Ramón, la pareja ha pasado unos días reflexionando sobre lo ocurrido. La vuelta a casa del murciano servirá para poner todas las cartas sobre la mesa y aclarar sus diferencias con Alberto. Mientras José Ramón estará intranquilo por cómo le recibirá Alberto, este último no tendrá claro si podrá perdonar o no a su marido. Aunque conseguirán superarlo, el bache atravesado en la pareja dejará a José Ramón bajo de moral, pero la inesperada visita de su madre le aportará los ánimos necesarios para afrontar el tramo final de la convivencia. Tras pasar un tiempo junto al resto de parejas, Mónica y Pedro han podido comparar su relación con la de los demás. De vuelta de la rutina diaria, es el momento de buscar situaciones que les permitan acercarse de nuevo, pero las imposiciones de la gallega y su tendencia a sacarle punta a todo se lo están poniendo difícil a Pedro. Las situaciones más cotidianas continuarán dando pie a desencuentros entre la pareja, lo que provocará que Mónica se derrumbe. Mientras, resuelto el enfado de Jonathan y Sabrina en Madrid, y una vez aclaradas las dudas, parece que las aguas vuelven a su cauce. El matrimonio disfruta de sus últimos días juntos en Alicante. Jonathan aprovechará la vuelta a casa para presentar a Sabrina a una de las personas más importantes para él, su mejor amigo, que hará muy buenas migas con Sabrina. La pareja dará un paso más en su relación y Sabrina aprovechará una cena romántica para confesarle a Jonathan que se está empezando a enamorar de él. En Barcelona, Tito sigue buscando momentos de intimidad que le permitan acercarse a Cristina. Para ello, preparará una sorpresa a la catalana: una sesión de tantra. Cristina estará cada vez más receptiva y te
Los matrimonios deberán tomar una decisión crucial en sus vidas: continuar con la relación, o iniciar los trámites del divorcio y seguir cada uno por su lado. Mientras que la pareja formada por Andrea y Bernardo se separó al poco tiempo de empezar su convivencia, el resto de matrimonios ha evolucionado de distinto modo. Mónica y Pedro, a pesar de su conexión inicial, han protagonizado una convivencia repleta de altibajos. Por su parte, la relación de Cristina y Tito ha estado marcada por la frialdad de la catalana hacia su marido, y eso que el gaditano no ha cesado en su intento por conquistarla. La primera pareja gay unida por el método, ha visto cómo su relación se tambaleaba por los planes de futuro de Alberto, y por las continuas inseguridades de José Ramón. Mientras, Sabrina y Jonathan mostraron una alta compatibilidad desde el primer momento, algo que les ha ayudado a superar los pequeños roces surgidos en el día a día. 30 días después de conocerse en el altar, las parejas se enfrentarán a la decisión más importante: si quieren o no seguir casados. Antes de tomar una determinación, cada uno de ellos, de forma individual, tendrá una charla con los expertos Marias Frías, Silvia Sanz y Rubén Turienzo, que les ayudarán a analizar cómo ha sido la evolución de la pareja y les plantearán la gran pregunta: ¿quieren o no iniciar los trámites para solicitar el divorcio? O de lo contrario ¿continúan con su matrimonio? En este punto, los cónyuges dispondrán de 24 horas por separado para poder reflexionar y responder a esta cuestión. Durante este tiempo podrán recurrir a familiares y amigos, que les aconsejarán y ayudarán a tomar esta decisión que es tan crucial en sus vidas. Por fin, cada pareja volverá a verse y llegará el gran momento en el que los dos descubrirán si ambos han decidido continuar apostando por la relación, o si por el contrario han decidido terminar con ella.
Doce personas de muy diferentes perfiles conocerán a su pareja en el momento justo de su boda. Después de un mes de convivencia, decidirán si siguen adelante con su unión. ‘Casados a primera vista’ se vuelve a proponer, una vez más, encontrar a seis parejas ideales a partir de un método pionero avalado por tres expertos que guiarán a los recién casados durante su primer mes de convivencia. Este grupo de profesionales está compuesto una vez más por la sexóloga y coach Marian Frías, la psicóloga clínica y sexóloga Silvia Sanz, y el experto en motivación de equipos Rubén Turienzo. Los tres han estudiado exhaustivamente los perfiles de distintos candidatos hasta encontrar a las parejas más compatibles. Por primera vez en la historia del programa, a una participante se le han encontrado dos candidatos con la misma compatibilidad. Los expertos del programa le propondrán que decida frente al altar a quién de los dos dará el ‘sí quiero’. ¿En qué se fijará para tomar su decisión? ¿Necesitará saber algo concreto para que se incline más la balanza por uno de los candidatos?.
En este segundo programa, los espectadores son invitados de honor de las bodas de dos nuevas parejas compatibles que se ven por primera vez en el altar, donde llegan como completos desconocidos para dar un importante paso en sus vidas: darse el “sí quiero”. Aunque los recién casados están convencidos de su decisión, ambos matrimonios comienzan con reticencias por parte de los familiares y amigos. Mientras que por un lado la madre de una de las candidatas no ve con buenos ojos su matrimonio y prefiere para ella a un amigo del novio, por otro, uno de los novios lleva como invitadas a su boda a un amplio porcentaje de mujeres, lo que levanta suspicacias entre la familia de su futura esposa. Además, tras su boda en el anterior programa, Jesús Carrillo y Jesús Macías despiertan tras su noche de bodas y su primera noche juntos para comenzar su vida en común. La pareja empieza a conocerse a fondo y a disfrutar de su vida de casados durante la luna de miel, para la que se trasladan a la ciudad de Brujas. Allí, ambos tienen que intentar ponerse de acuerdo y aprender a acercar posturas para planificar los lugares que quieren visitar durante el viaje..
En la tercera entrega, Jesús Carrillo y Jesús Macías prosiguen con su luna de miel en Brujas, una de las ciudades más románticas del mundo. Aunque los primeros roces en la pareja ya han empezado a surgir por los motivos más insospechados, no les cuesta dejarse llevar por el ambiente romántico de la ciudad y pasan divertidos momentos juntos, en los que también surge la complicidad entre ambos. Además, deben tomar una importante decisión: dónde vivir tras la luna de miel. Por otro lado, tras vivir la boda de sus sueños, llega el banquete para Ruth y Jaime, momento en el que la hermana de Ruth aprovecha para advertir de las sospechas que tiene sobre Jaime, y en el que quedan patentes las diferencias entre familiares y amigos de ambos. Para Mónica y Jordi la noche de bodas llega a su fin y empieza la vida de matrimonio. La pareja atraviesa el Atlántico para disfrutar de unos días en Nápoles. La miss aprovecha su visita a Italia para ponerse al día con las últimas tendencias visitando algunas de las tiendas de la ciudad, lo que saca de quicio a su recién estrenado marido. Marie y Jonathan, por su parte, disfrutan de su banquete de boda y pasan juntos su primera noche, tras la que despiertan para iniciar su luna de miel. Para su viaje, tienen a su disposición un barco que les permite disfrutar de las maravillosas experiencias que ofrece el caribe mexicano, aunque el carácter tranquilo de Jonathan choca con el terremoto Marie, lo que empieza a marcar las primeras diferencias. Además, la pareja compuesta por María y Rafa es la siguiente en verse por primera vez en el altar, donde llegan como completos desconocidos. A pesar del feeling y la atracción entre ellos, las reticencias de la hermana y la tía de María, que no están nada convencidas de que Rafa sea el chico adecuado para ella, salen a la luz..
En la cuarta entrega, la extremeña Ruth tiene muy claro que le gusta Jaime, pero su hermana no está muy convencida. Sin embargo, por mucho que opinen los demás, el futuro de los recién casados está solo en sus manos. La pareja inicia su luna de miel donde intentan conocer mejor sus gustos y aficiones, para lo que viajan a Lisboa. Pero pronto, empezan a surgir las primeras desavenencias entre la pareja. Jaime sorprende a Ruth llevándola a un local de la ciudad que él considera emblemático, pero que no causa esa misma sensación en su mujer. Lo que a priori parecía un viaje romántico en el que disfrutar de la ciudad, pronto se transforma en una situación tensa y desagradable. En Bruselas, los últimos días del viaje de Jesús y Jesuli arrancan con buen humor. El conflicto llegó por la diferencia de gustos, pero lograron ponerse de acuerdo en una decisión: dónde iban a convivir tras la luna de miel. Así, la pareja comienza la convivencia en Cádiz, donde reciben la visita de la madre de Jesús y de la tía Amparo. Jordi y Mónica, por su parte, continúan su luna de miel en Nápoles. Desde el principio, él tuvo serias dificultades para adaptarse a los gustos de su esposa. La pareja vivió sus primeros desencuentros, pero ambos pusieron de su parte para intentar mejorar la situación. Además, Jordi sorprende a Mónica con un viaje en coche a Sorrento, momento que les sirve para desconectar y aprovechar para conocerse un poco mejor. La noche de bodas de Marie y Jonathan no fue como a ella le hubiera gustado. La luna de miel en un barco, tampoco resultó como esperaban. Lo que parecía un paraíso romántico, al final logró distanciarles. Comienza un nuevo día en Isla Mujeres, donde Jonathan prepara para su esposa una jornada repleta de sorpresas, algo que cambia radicalmente la evolución de su relación. Además, deben tomar la importante decisión de dónde vivir tras la luna de miel. Entretanto, en México, María y Rafa vivieron un momento mágico
Samantha y Juan Diego pasan una apasionada noche de bodas. Además, conocen el destino de su luna de miel, Atenas, donde comienzan a disfrutar de sus primeros días como marido y mujer. Para Ruth y Jaime, su luna de miel en Lisboa terminó en desastre por causa de la aparición de ronquidos y sus diferencias en cuanto a gustos de ocio nocturno. Ahora, es momento para la pareja de trasladarse a Cáceres, donde Ruth tiene sus obligaciones laborales, para iniciar la vida en común, no sin antes pedir ayuda a los expertos para intentar solucionar sus problemas de pareja. Silvia Sanz les visita para ayudarles a acercar posturas y recuperar la química que les unió los primeros días. ¿Serán capaces de dejar atrás sus diferencias? Mientras, en Marrakech, María y Rafa prosiguen con su viaje de novios, donde empiezan a surgir las primeras desavenencias entre la pareja. Su sentido del humor tan distinto, unido a la petición de María de tomarse la relación con calma, no gusta a Rafa, lo que provoca que el joven se empiece a impacientar. Sin embargo, su última noche de luna de miel les sirve para encontrar puntos en común e iniciar una nueva etapa con energías renovadas. Además, tienen que ponerse de acuerdo acerca de dónde trasladarse juntos: Sevilla o Jerez de la Frontera. Para Jesús y Jesuli ya ha comenzado la convivencia, y con ella los primeros roces. Durante los primeros momentos de su visita a Cádiz, la familia de Jesús se sorprendió al descubrir un secreto inconfesable de Jesuli. Ahora, es el momento de que Jesuli conozca a su suegra, Conchi, y comparta techo durante unos días con ella y la tía Amparo, que no ven con buenos ojos que el matrimonio comparta cama, por lo que le toca irse a dormir al sofá. ¿Cómo sobrellevará el gaditano la situación? Entretanto, pese a los problemas y los pequeños desencuentros durante su viaje a Italia, Mónica y Jordi han sido capaces de hablar sobre sus diferencias y disfrutar juntos. Ahora comienza la convivenc
Empieza un nuevo día de convivencia para las parejas de recién casados. Para que su relación funcione, Ruth y Jaime deben superar sus problemas de comunicación. Ruth propone a su marido realizar juntos algunas tareas de bricolaje, algo que no gusta del todo a Jaime ya que él no suele llevar a cabo reparaciones en el hogar y está acostumbrado a dejarlo en manos de especialistas. Además, la pareja aprovecha para salir de compras, momento en el que Jaime intenta mostrar a su esposa sus dotes de personal shopper sin muy buenos resultados. También comparten una cena con unos amigos de Ruth, que estuvieron presentes en la boda. ¿Qué percepción tendrán sus amistades de esta nueva pareja? Mientras, para Samantha y Juan Diego surgen los primeros sobresaltos durante la convivencia. Acostumbrado a vivir con sus padres, a su llegada a Madrid, el joven murciano tiene dificultades para realizar las tareas del hogar, por lo que intenta que esta labor recaiga en su pareja. Sin embargo, Samantha no está para nada dispuesta a hacer de madre. Además, sus dificultades para entenderse provocan un enfriamiento en la pareja. En Cádiz, la madre de Jesús Carillo ya ha conocido a su yerno. Para Jesuli, ha llegado el momento de mostrar su arte como estilista, para lo que se ofrece a peinar a Conchi para asistir a un concierto en el que él interviene. Sin embargo, Conchi, Jesús y la tía Amparo deciden marcharse antes de tiempo del concierto, algo que no sienta nada bien a Jesuli. Además, llega el momento de que la tía Amparo y Conchi vuelvan a Córdoba. Una vez a solas, Jesuli propone a Jesús una actividad para intentar demostrarle que las parejas deben trabajar siempre para ir sincronizadas en una misma dirección: un paseo en tándem, algo que provoca algún que otro imprevisto. Entretanto, Mónica y Jordi prosiguen con la convivencia en Valencia. La pareja, que continúa con pequeños roces, decide retomar el ejercicio físico, por lo que acude a la playa a hacer cross
Ruth y Jaime continúan chocando por las tareas más cotidianas. Además, la pareja vuelve a encontrarse con los padres de Ruth por primera vez desde la boda para merendar, momento en el que se experimenta una gran tensión entre Jaime y su suegro. La relación llega a un punto muerto. La decepción de Ruth y las mentiras de Jaime impiden aclarar las cosas, por lo que Ruth busca apoyo en su hermana, a la que cuenta cómo han ido los primeros días como matrimonio. Tras la conversación con su hermana Ruth habla con Jaime para poner los puntos sobre las íes. Mientras, las diferencias entre Samantha y Juan Diego continúan provocando problemas. La pareja aprovecha sus primeros momentos juntos para ir a la compra, algo que saca a relucir aún más sus diferencias. Además, Samantha le presenta a Juan Diego a algunos de sus amigos que no pudieron ir a la boda y, aunque el joven no causa muy buena impresión entre sus amistades, deciden disfrutar de una noche de fiesta por el madrileño barrio de Chueca, un ambiente al que él no está para nada acostumbrado. Entre tanto, en Valencia, la presencia constante de la familia de Mónica no facilita las cosas. La pareja invita al padre de Mónica, su mujer y la abuela a cenar y queda claro que Jordi ya es parte de la familia, aunque el joven se agobia un poco cuando le plantean que debe empezar a buscar trabajo. Además, el matrimonio continúa sin resolver sus diferencias en el terreno sexual, algo que ya empieza a preocupar a Mónica. Jesuli intentó impresionar a su familia política con su arte como estilista y como cantante. Tras la marcha de la tía y la madre de Jesús, continúa la convivencia en Cádiz, por fin, a solas. Jesuli intenta sorprender a Jesús llevándolo a pasar el día a Véjer de la Frontera, algo que no gusta del todo a su marido. Sin embargo, Jesús también intenta sorprender a su pareja, para lo que visita el mercadillo y busca un regalo para Jesuli. ¿Acertará con la elección? Tras las primeras
De las seis parejas que iniciaron la convivencia, cinco prosiguen con el matrimonio, aunque todas están sufriendo algún altibajo. Jesus y Jesuli pasan por un momento delicado. Marie y Jonathan viven una etapa romántica gracias a su primer beso. Mónica y Jordi comparten risas y complicidad, pero hay un asunto que les separa y que siguen sin resolver. María y Rafa, por su parte, han logrado superar situaciones muy tensas, pero los roces entre ellos han sido duros y aún pueden pasar factura, y Samantha y Juan Diego viven su momento más tenso después de una discusión provocada por un casting. Ha llegado el momento de que, por fin, puedan intercambiar impresiones con otras personas que están en su misma situación. Los expertos Marian Frías, Rubén Turienzo y Silvia Sanz, convocan a todas las parejas para que pasen un fin de semana juntos en Madrid, salvo en el caso de Samantha y Juan Diego, que necesitan pasar más tiempo a solas. El objetivo es que se conozcan y puedan compartir y comparar experiencias que les sirvan para reforzar su relación. Las parejas de recién casados conviven 48 horas en Madrid, con la idea de que puedan solucionar sus conflictos. Se encontrarán en un entorno agradable para que puedan expresarse con libertad y compartir esta experiencia tan intensa que todos están viviendo. También, recibirán asesoramiento de los expertos para intentar solucionar los conflictos derivados de la convivencia, en una entrega llena de sorpresas y confidencias en la que cada pareja pone en común con el resto sus miedos y frustraciones, así como las claves de un buen funcionamiento del matrimonio. Además, durante este primer encuentro, se produce una intensa disputa entre una de las parejas, por lo que Marian Frías decide hacer una sesión a solas con ellos. Durante el segundo día de convivencia en Madrid, las parejas pasan la jornada separadas para que puedan desahogarse sin tapujos. Mientras las chicas y Jesús disfrutan de una sesión de belleza
Tras muchas horas de nervios, ilusión e incertidumbre, María José Ojados y Julián Escudero se ven por primera vez en el altar. Las primeras impresiones son demasiado buenas y los nervios se calman. Para Julián es su tercer matrimonio, para María José el segundo. Ambos estaban nerviosos hasta que sus miradas se cruzaron por primera vez y sintieron que podía haber feeling entre ellos. Los recién casados se han dado el 'sí, quiero' sin titubear ni un momento. Los nervios ya se han pasado para Julián y María José que no dudaron en darse el 'Sí, quiero'. La complicidad entre ambos es evidente desde el cruce de sus primeras palabras y también en la fogosa sesión de fotos. Julián abraza a su mujer para las fotos y siente como el deseo empieza a quemarle, María José le frena porque quiere ir más despacio. Carolyne reúne a las mujeres de su vida para contarle que se casará con una desconocida. Cuando le preguntan si se lo ha contado a su padre y hermano, la futura novia confiesa que no lo ha hecho porque no comparten su homosexualidad aunque la respetan. A pocas horas de casarse con una desconocida, Sheyla recibe un regalo de su futura mujer. Una rosa roja y la muñeca de Brave, Sheyla no sabe bien cómo interpretar ambos regalos... La intención de Carolyne era la de mostrarle la mujer valiente, independiente y pasional que es. A pocas horas de dar el 'sí, quiero', Carolyne recibe un regalo de Sheyla, su futura mujer. Los nervios invaden a Carolyne que no sabe cómo interpretar el pintalabios rojo de Channel y la carta. Aún así, ella siempre mira el lado positivo y se ilusiona con la sorpresa que acaba de recibir. Carolyne es la primera en llegar al altar, los nervios se apoderan de ella en la eterna espera hasta que ve llegar a Sheyla impresionante con su vestido de novia, sus labios rojos y su gran sonrisa. Los primeros cruces de miradas tranquilizan a ambas. Carolyne y Sheyla han sentido el flechazo a primera vista y sus votos son mágicos. Carol
En este segundo programa, los espectadores son invitados de honor de las bodas de dos nuevas parejas compatibles, que se ven por primera vez en el altar, donde llegarán como completos desconocidos para dar un importante paso en sus vidas: darse el “sí quiero”. Así, se produce la primera boda interracial del programa. Además, estas dos bodas tienen algo en común; en ambos casos, la madre de la novia no ve con muy buenos ojos a su nuevo yerno. Mientras, las parejas formadas por Sheyla y Carolyne y MªJosé y Julián despiertan tras su noche de bodas, y su primera noche juntos, y ponen rumbo a sus respectivas lunas de miel. Mientras Julián y Mª José viven los primeros días como marido y mujer en la Isla de Holbox (Cancún), Sheyla y Carolyne se dirigen a Chiapas, enclave que despierta susceptibilidades en la pareja, cuando una de ellas descubra que la otra ha estado en este destino con su ex..