Boliche, Tete y Guille quieren enviar una maqueta para participar en un concurso de jóvenes cantantes, sus problemas comienzan cuando se les rompe el teclado y tienen que ingeniárselas para poder grabar a tiempo. Al fallecer un antiguo alumno lega al colegio una gran suma de dinero que a Candela le viene como agua de mayo teniendo en cuenta la cantidad de arreglos que necesita la escuela.