Febrero de 1990. Mercedes sigue con su huida a "ninguna parte" después de la discusión con Antonio en el capítulo anterior. Pero su viaje se ve interrumpido, de manera imprevista, por un accicidente. Mientras, Antonio, ajeno a todo, viaja a Sevilla para encontrarse con Salgado, con quien quiere hacer negocios de cara a la Expo. En el tren coincide con Toni, que también viaja a Sevilla para investigar el caso de los niños robados. Inés, tras recibir una llamada de Clara, está preocupada por su madre, ya que no ha llegado a casa y no tienen noticias de ella. Ante todo intenta no preocupar a la abuela, pero Herminia no es tonta.