Mientras los hombres de Patton se preparan para cruzar el río Rin y penetrar en Alemania, el contraataque alemán arrasa a otras unidades estadounidenses en Bélgica, dando comienzo a la Batalla de las Ardenas. Los aliados recurren a Patton para emprender el rescate. En poco tiempo la pequeña ciudad de Bastoña se convierte en el centro de la campaña, mientras las tropas estadounidenses luchan por mantener su territorio. A pesar de las inclemencias del tiempo, Patton y el 3º Ejército avanzan hacia el norte, sacudiendo las líneas alemanas y relevando a los defensores de Bastoña.