En la comisaría se celebra una rueda de prensa para presentar un alijo de droga que se ha incautado. Al acabar, Don Lorenzo pide a Paco y a sus hombres que transporten la cocaína a la incineradora. Durante el transporte pinchan una rueda y tienen que sacar la droga del vehículo. Una de las bolsas se rompe y para justificar su torpeza, deciden mentir a sus responsables y les cuentan que unos encapuchados les han robado. La brigada de policía científica se inaugura con la llegada de Silvia, hija de don Lorenzo y ex de Lucas. Ella será la máxima responsable de este nuevo departamento. Lucas se muestra incómodo con el reencuentro, e incluso, un poco violento. En su primera investigación, Silvia detecta que su ex ha consumido estupefacientes. El dueño del kiosco del barrio aparece muerto en su casa. La policía científica investiga las causas del fallecimiento y descubre que ha mantenido relaciones sexuales antes de morir. Bernarda, asustada, confiesa a Lola que pasó la noche con el quiosquero y ahora teme ser acusada de asesinato.