En una parroquia aparentemente tranquila, el funeral del sacristán Eliab Peña marca el inicio de una serie de eventos macabros. Durante la ceremonia, un misterioso hombre deja un corazón humano envuelto en hojas de palma y espinas sobre el altar, lo que desata una investigación de la UNIC. Los detectives conectan este caso con el asesinato de un académico teólogo en un aparente ritual religioso. Excavaciones en los terrenos de la iglesia revelan cuerpos enterrados y crímenes ocurridos hace más de 15 años. Mientras la comunidad defiende al padre Tomás, las evidencias apuntan a oscuros secretos en la parroquia, desatando un espiral de intriga y horror.