Mariano está agotado de vivir una vida de mentiras y le enrostra a su padre que por intentar complacerlo debió casarse y formar una familia pese a que es homosexual. Baltazar piensa que esa fue su opción, pero el abogado le asegura que el es así y no hay forma de que cambie, aunque eso le avergüence. Además, le confesó que hace años tiene una relación paralela con un hombre.