Rita por fin logra acariciar a un dodo, pero sólo porque el animalito tiene una herida en el pie. Rita lleva al dodo a su casa para cuidarlo y darle mucho cariño y demasiada comida. El dodo engorda demasiado y necesita ejercicio urgentemente. Rita aprende que para cuidar a otros hay que pensar en ellos y no en uno mismo. Y haciéndolo ganará un nuevo amigo.