Santiago recibe la visita de su madre, que resulta ser la doctora Matesanz, una profesora de Universidad de Mateo, a la que éste admira profundamente. Mateo se ofrece a ayudar a su ex profesora, ya retirada, a volver a la docencia. Algunos extraños fenómenos comienzan a sucederse en la casa del Misionero. Alfredo descubre un viejo diario que relata un romántico episodio del pasado y que quizás sea la clave. Olga acude cada noche, a escondidas, a dormir a casa de Pedro, que oculta como puede la presencia de su amiga en su habitación, además de aguantar estoicamente a la chica que le gusta metida en su cama. Sonia, la novia de David, se presenta por sorpresa en San Martín, pero David no parece demasiado entusiasmado con su presencia. Él ahora está centrado en su vida en el pueblo y en la salud de Tom, que debe someterse a un trasplante de médula. David se ofrece como donante para la operación.