En el juicio, Pablo le recuerda a Clementina que Medrano es el culpable del sufrimiento de Marisela y Franca, por lo que con su silencio solo ayudaría a que el miedo gane. Además, el doctor Domínguez la invita a hablar con la verdad para también ayudar a otras mujeres que están pasando por una situación similar. Los argumentos resultan sólidos para el juez que falla a favor de Marisela.