Pablo Domínguez llega a Venezuela para afrontar la primera audiencia en los juzgados de ese país por el caso de Marisela, quien solo tiene el objetivo de recuperar la custodia de su hija Salma. Las cosas no están fáciles para Pablo, ya que Medrano, el exesposo de Marisela, ha creado todo un show mediático en torno a una supuesta relación sentimental entre ella y su abogado defensor.