Durante una intervención en un lugar protegido, Sarahoui y Vanessa son llamadas para detener a un hombre que ha irrumpido ilegalmente en el lugar. Por la tensión del momento, Sarahoui dispara al hombre. ¿Fue un acto de legítima defensa o un error del comisario? Mientras tanto, Justine tiene que hacer malabarismos para vivir con Karim y Layla. ¿Cómo va a convivir con una amiga de la infancia que ha encontrado tras 30 años de ausencia? También se enfrenta a la difícil tarea de apoyar a su hermana, tratando de encontrar un equilibrio entre estar presente sin ser demasiado intrusiva. Por su parte, Vanessa tiene que asumir su propio proceso, sumiéndose en la negación. Ahoga su desesperación en el alcohol, mientras se ve desbordada por el caso de Sarahoui.