Cuando Isabel llega al fin del mundo con su hijo Diego, la caravana en la que viajan es asaltada por delincuentes puelches. Isabel logra escapar y llegar al fuerte, pero su marido es asesinado al romper un pacto de no agresión.
Isabel decide abandonar Villarica con su hijo, pero la caravana en la que viajan es atacada, e Isabel queda herida y Diego muere. En tanto, tras descubrir la relación entre Rocío y Nehuén, Juan de Salas toma una dura decisión.
Isabel, herida en cuerpo y alma, trata de suicidarse. Por otra parte, Juan de Salas asesina a Juana por el secuestro de Rocío, mientras el ejército mapuche ataca el fuerte y quedan sitiados.
Isabel trata de conseguir alimento. Traicionado, Agustín abandona a Juan de Salas y se refugia en su casa. Finalmente, Nehuén se entera de que Rocío está embarazada.
Juan de Salas pone en jaque a Agustín: o le trae la cabeza de Nehuén o mata a Isabel, su amante. En tanto, Alonso, advertido por Isabel, se salva de ser envenenado y toma represalias contra los conspiradores.
Juan de Salas recupera la libertad y ejecuta a Alonso y sus compinches. Por otra parte, también mantiene como rehén a Nehuén. Pero Isabel y Rocío arman un plan para liberarlo.
Rocío está muy mal, pero su padre no le permite ir con Nehuén. Por su parte, Nehuén llega del sur convertido en un gran guerrero, lleno de prestigio y con la decisión de rescatar a Rocío.
Nehuén se reencuentra con Rocío. En tanto, Juan de Salas, cuando se entera de que Diego está vivo y que tiene la marca, se lo lleva a España. Ahora Isabel deberá alcanzarlos antes de que lleguen a destino.