En tiempos ancestrales, un demonio llamado Karma intentó destruir el mundo por medio de sus semillas del mal, pero gracias a la fuerza de un poderoso guerrero llamado Zenki, el mundo volvió a la normalidad. Ozune Enno, maestro del templo Enno, sello a Zenki la bestia guardiana dentro de un pilar, ya que su sed de violencia y salvajismo era descomunal. El guardián quedaría confinado al pilar por tiempo indefinido en espera del momento de que algún sucesor del maestro Enno rompiera el sello de Bayula y volver a ser convocado a lucha.