María Luisa sufrió un interrogatorio a manos de Mateo, quien busca recuperar a toda costa los cinco millones de euros que la mujer escondía. Tras mentir y señalar que el dinero fue quemado por Cristóbal, su captor la obligó a firmar unos documentos que no pudo leer. En un descuido, "Lulú" enterró el lápiz en la mano de su secuestrador y salió pidiendo ayuda a los gritos, pero fue alcanzada por el hijo de Eliana, quien la arrojó por la baranda de la cabaña causando su muerte en el acto. Como un último acto de crueldad, el asesino junto con Gaspar decidieron trasladar su cuerpo al pasaje Nueva Esperanza, donde fue encontrado por su nieto.