María Inmaculada se va de la casa de Valeria sin decirle a nadie a un bar. Allí se encuentra de casualidad con Leopoldo, quien no la reconoce porque está disfrazada de Coral. Mientras Salvador, Leopoldo y María Inmaculada hablan llegan al mismo bar Miroslava y Jessica. Cuando María Inmaculada se levanta de la barra Jessica la sigue al baño. Mientras tanto, Miroslava se acerca a Salvador y a Leopoldo para mostrarles la felicidad que le causa el sufrimiento de Valeria. Estos dos se levantan y se van. María Inmaculada increpa a Jessica diciéndole que vino a vengarse por no haber cumplido la promesa de sacarla de la cárcel. Jessica logra escaparse del baño dejando encerrada a María Inmaculada. Y busca a Miroslava para irse del lugar.