A veces los objetos tienen historia. Un anillo, un pañuelo, una joya… o una caja de madera. Hay muebles que guardan solo cosas, y otros que guardan recuerdos, decisiones, huidas. Hoy te contamos la historia de un mueble muy especial: una caja de tea. Una especie de baúl típico en la isla de La Palma desde la Edad Media, construido con la madera del corazón de los troncos del pino canario. Una de esas cajas de tea llegó a casa de Gervasia en el siglo XIX y más de 100 años después sigue en la familia. La bisnieta de Gervasia, Rosabel, ha tenido que sacar esa caja de tea de su casa, amenazada por la lava del volcán de Cumbre Vieja.