Un Rostro en mi Pasado

Elisa Estrada é uma mulher inteligente e trabalhadora, que é dona de uma editora de prestígio chamada El Mercurio. Ela é casada com Armando Zertuche e tem quatro filhos: Roberto, Miranda, Clara e Enrique. No entanto, sua vida profissional de sucesso contrasta com sua vida pessoal desastrosa. Armando é um completo inútil que vive do trabalho de sua esposa e não se preocupa com seus filhos. Devido ao pouco apoio de seus pais, os filhos do casal sofrem distúrbios graves de personalidade e comportamento. Roberto imita o exemplo de seu pai e se dedica apenas à boa vida, enquanto Miranda sofre de cleptomania e Clara se tornou mitómana. O único que não deixou o bom caminho é Enrique, quem Elisa adotou quando era pequeno. Frustrada e impotente ao não poder resolver os conflitos familiares, Elisa encontra consolo em sua amizade com Ernesto Vidal, um escritor com uma filha, Mariela. No entanto, o que Elisa não sabe é que Ernesto está prestes a publicar um livro que revela um grande número de mafia negócio e que especialmente envolve seu chefe, Carlos Duboa. Gradualmente, a amizade entre Elisa e Ernesto dá lugar ao amor, mas Ernesto recebe ameaças da máfia, então ele escreveu uma carta para Elisa dizendo-lhe para olhar em seu departamento. Após a chegada, Elisa descobre o corpo de sua amada e, inconscientemente, pega a arma apenas quando a polícia chega. Elisa está preso pelo crime e condenado a quarenta anos de prisão, e Armando aproveita a oportunidade para manter o dinheiro de sua esposa e colocar seus filhos contra a sua mãe; No entanto, Enrique não é influenciado e acredita na inocência de Elisa. Dez anos mais tarde, o porteiro do edifício onde viveu Ernesto declara que Elisa não cometeu o crime, mas morre antes de confessar que o verdadeiro assassino, ele sempre escondeu a verdade por medo. Elisa é liberado e dedicou seus esforços para recuperar o amor de seus filhos e encontrar o verdadeiro assassino. No entanto, Elisa não te

Elisa es una mujer inteligente y trabajadora, dueña de una prestigiosa editorial llamada El Mercurio. Está casada con Armando y tiene cuatro hijos: Roberto, Miranda, Clara y Enrique. Sin embargo, su exitosa vida profesional contrasta con su desastrosa vida personal. Armando es un completo inútil que vive del trabajo de su esposa y tampoco se preocupa de sus hijos. Debido al poco apoyo de sus padres, los hijos de la pareja sufren graves trastornos de personalidad y conducta. Roberto imita el ejemplo de su padre y se dedica sólo a la buena vida, mientras que Miranda sufre de cleptomanía y Clara se ha convertido en mitómana. El único que no ha dejado el buen camino es Enrique, a quien Elisa adoptó cuando era pequeño. Frustrada e impotente al no poder solucionar los conflictos familiares, Elisa encuentra consuelo en su amistad con Ernesto Vidal, un escritor con una hija, Mariela. Sin embargo, lo que Elisa no sabe es que Ernesto está a punto de publicar un libro que destapa un gran número de negocios de la mafia y en el que implica especialmente a su jefe, Carlos Dubois. Poco a poco, la amistad entre Elisa y Ernesto da paso al amor, pero Ernesto recibe amenazas de la mafia, por lo que le escribe una carta a Elisa diciéndole que se vean en su departamento. Al llegar, Elisa descubre el cadáver de su amado e inconscientemente recoge la pistola justo cuando la policía entra. Elisa es arrestada por el crimen y condenada a cuarenta años de cárcel, y Armando aprovecha la oportunidad para quedarse con el dinero de su esposa y poner a sus hijos en contra de su madre; sin embargo, Enrique no se deja influenciar y cree en la inocencia de Elisa. Diez años después, el conserje del edificio donde vivía Ernesto declara que Elisa no cometió el crimen, pero muere antes de confesar quién es el verdadero asesino, pues siempre ocultó la verdad por temor. Elisa es puesta en libertad y dedica sus esfuerzos a recuperar el amor de sus hijos y a encontrar al verdad