Russlands Krieg gegen die Ukraine hat in den Gesellschaften Osteuropas, insbesondere in den Ländern der ehemaligen Sowjetunion, alte Bruchlinien vertieft und neue geschaffen. Besonders betroffen sind die nationalen Minderheiten, die oft als verlängerter Arm fremder Machtinteressen angesehen werden.
La invasión rusa de Ucrania ha acentuado viejas divisiones en el seno de las sociedades europeas e incluso ha dado lugar a otras nuevas, especialmente en los Estados de la antigua Unión Soviética. Las minorías étnicas, que a menudo son consideradas simpatizantes de las potencias extranjeras con las que comparten la lengua, son las primeras afectadas.