Numerosos servicios de cáterin no cumplen las garantías mínimas de seguridad alimentaria. Trabajan, en muchas ocasiones, sin los permisos establecidos. Las bodas, una tipología de evento que, tras las restricciones sufridas por la pandemia, ha experimentado un importante aumento, provocando directamente que hayan surgido numerosas empresas organizadoras de eventos que no cumplen las garantías mínimas de seguridad alimentaria. Son, concretamente, las dedicadas a los servicios de cáterin, que trabajan, en muchas ocasiones, sin los permisos establecidos ni las infraestructuras ni personal necesarios para el correcto desarrollo de su actividad.