El programa arranca con la denuncia de un grupo de padres que tienen escolarizados a sus hijos con altos grados de discapacidad en el colegio María Mariño de A Coruña. Los padres llevan tiempo denunciando que el colegio tiene varias deficiencias en sus instalaciones y en las características del servicio de comedor, no tiene comedor propio y los niños, todos con algún tipo de diversidad funcional, tienen que ir diariamente al comedor de un centro de personas adultas con discapacidad. Con este centro, además de compartir el espacio del comedor, comparten el menú. Los padres aseguran de que se trata de un menú hecho para usuarios adultos, que no tiene en cuenta las necesidades nutricionales de los niños. Además, hay varios niños que no pueden masticar o tragar y que necesitan un menú especial de triturado, sin embargo, según los padres, el servicio de comedor del centro se limita a triturar lo que haya de comida ese día.