Oriana se sorprende al ver que Alberto acepta de buena gana el que ella le diga que lo dejará libre para que sea feliz, pero él no puede dejar de pensar en Mía y sufre al verla tan cercana a David. Por su parte, David, le suplica, una vez más a Mía, que le dé una oportunidad, pero la chica se niega, a pesar de que él la ayuda en todo momento.