When Oscar carelessly tosses Elmo's fuzzy blanket into his trash can, Elmo dives in after it, into Grouchland, the land of Grouches, stinky garbage and the greedy Huxley who hasn't learned how to share.
Elmo ama a su peluda manta más que a nadie en el mundo. Ambos forman un equipo inseparable desde la mañana a la noche,pero en un accidente, la manta de Elmo se cae en el cubo de Oscar. Sin pensárselo dos veces, Elmo se mete en el fondo del cubo, desde donde se verá arrastrado sorprendentemente al país de los gruñones, un mundo de criaturas malolientes. En ese inhóspito lugar, Elmo se verá inmerso en mil aventuras para recuperar finalmente su manta, aunque en el camino aprenderá unas cuantas lecciones, entre ellas no ser tan egoista y compartir sus cosas con los demás.