Un mes después de su llegada al Santuario, Pilar experimenta pesadillas y presencias inquietantes, que aumentan al presenciar un extraño colapso en otra paciente y descubrir detalles inexplicables sobre el lugar. Cuando intenta investigar, es perseguida y tranquilizada a la fuerza, pero luego logra escapar con Rocío hasta descubrir pruebas de que han estado allí antes. Al ser descubiertas, Valle y Víctor deciden expulsarlas urgentemente del "proyecto".
Valle asiste a una entrevista en el Santuario, donde le explican que necesita mejorar las incubadoras de gestación de inteligencias artificiales en cuerpos simulados de mujeres embarazadas, un proyecto que desafía la ley y busca erradicar efectos secundarios en la población. Aunque dudosa, Valle decide aceptar el puesto tras consultarlo con una inteligencia artificial que recrea a su difunto padre.