Marta Hazas recorre los lugares más desconocidos y bizarros de Galicia acompañada por Xosé Touriñán, que se apunta descaradamente al viaje con la intención de conseguir copresentar el programa. Juntos llegan a Muxía, donde las piedras conceden deseos; descubren el peculiar cementerio de Finisterre en el que no hay nadie enterrado; visitarán el peculiar Museo de Man, un artista alemán que solo vestía un taparrabos; pasan la noche en el sanatorio de tuberculosos abandonado de Cesuras y conocen a una de las superabuelas.