Con la muerte de Soledad, la mujer maltratada por su marido, a los ojos de Nerea, Jaime parece el principal sospechoso de su muerte, ya que se encontraba junto al cuerpo cuando llegaron el resto de los policías al lugar del crimen. Por otro lado, la madre de Luna regresa y decide llevarse a su hija. Esta noticia le cae como un jarro de agua fría a Susana e intentará evitar a toda costa que se lleven a la niña.