En el desenfreno de una despedida de soltero, cuatro amigos, algunos casados y todos respetados socialmente, enloquecen con una stripper contratada por ellos. Un evento terrible los hundirá en el horror y pondrá a prueba sus exitosas vidas.
Ante la muerte de Daniela, Marco roba el bolso de la fallecida para saldar deudas. Rubén, con su gimnasio en declive, se obsesiona con Daniela, afectando su vida amorosa. Gabriel descubre que Daniela era su estudiante, hundiéndose en la culpa.
Gabriel asume un empleo que erosiona su ya tensa amistad con Benjamín, Rubén y Marco. Alonso destapa un engaño que pone al grupo en riesgo, y Marco se consume en celos. Un brindis se convierte en un campo minado de verdades.
Marco pierde el dinero en un asalto y Roberto le ofrece una peligrosa solución. Gabriel descubre en el teléfono de Karina que Daniela tenía dos números. Benjamín rompe con Alonso profesionalmente, lanzándose hacia un punto sin retorno.
Alonso, herido en su ego, arroja a Tamara en un laberinto de dudas. Carmen descubre que Daniela estaba embarazada, lo que incrementa la presión sobre Karina. Un video en el móvil de Daniela lleva a Marco a confesar su robo.
Julieta y Miranda reclutan a Fernando para exponer el caso de Daniela en los medios. Tamara descubre una foto comprometedora de Daniela, impulsando a Benjamín a confesar su crimen.
Tamara, cuando va a delatar a Benjamín, decide protegerlo, generando una avalancha de mentiras que sacuden al grupo. Marco introduce a Roberto en el gimnasio, generando la desconfianza de Rubén, quien finalmente cede.
Miranda y Carmen llevan el caso de Daniela a la TV, disparando angustia en Marco, Gabriel, y Rubén. Ya en la cuerda floja, Benjamín elige el aislamiento. Karina revela que Daniela tenía un misterioso amante adinerado, luego desaparece de escena.
Marco, consumido por los celos, enfrenta a Gabriel para alejarlo de Julieta. Durante la cena para celebrar la nueva sociedad, Rubén suelta una bomba sobre Marco y luego desaparece. Ignacio entabla un peligroso juego de espionaje con Karina.
Despertando de un coma etílico, Rubén admite haber movido el cadáver de Daniela, subiendo la tensión. Carmen roba para obtener pistas y es estafada. Benjamín y Tamara intercambian autos para buscar el cuerpo.