Victoria habla con el Padre Carmen sobre hacerse viejo. Y sobre cómo ya no viven la vida con tanta intensidad como cuando eran jóvenes (a pesar de tener 32 años). Cumplir años tiene lo mismo de positivo que de negativo. Eres más sabio, sabes enfrentarte mejor a los problemas (eso si has pagado tus buenas sesiones de terapia), pero también tienes más achaques y la gravedad empieza a afectar sobre tu cuerpo. Digamos que cuando eres joven lo bueno va por fuera y lo malo por dentro, y eso se va revirtiendo con los años. ¿No sería increíble tener un retrato como el de Dorian Grey que envejeciera por nosotros y pudiéramos seguir dejando toda la mierda oculta dentro? Porque, no nos engañemos, todos sabemos que la apariencia es lo único que importa.