En solo un año, El País ha contabilizado 500 casos de abusos sexuales en la Iglesia desde los años cuarenta. Los ha recopilado en tres informes que ha entregado a la Conferencia Episcopal, el Defensor del Pueblo y el Vaticano. La Iglesia ya no puede negar el escándalo, pero sigue sin revelar lo que sabe y sin resarcir a las víctimas.