Estamos metidos ya en Semana Santa, días festivos que implican que muchos españoles hayan planeado unas pequeñas vacaciones. Un descanso que este año ha registrado un aumento del 35% de las reservas hoteleras respecto al anterior. Pero cada vez son menos los que las contratan a través de agencias de viajes físicas, un sector minorista y comisionista que contaba en 2008 con más de 20.000 puntos de venta, pero que en 2022 se quedó solamente con 9.500. Los expertos apuntan a la pandemia y las nuevas tecnologías como los motivos principales que han alejado a la clientela de este tipo de negocio.