Al mundo de la diplomacia se le asocia normalmente con gente de traje negociando documentos importantes hasta altas horas de la noche, cócteles en sitios exclusivos y lujo en general. Una imagen a la que ha contribuido el cine y la literatura. Pero la realidad, por lo menos la realidad de la diplomacia española [https://elpais.com/noticias/maec-ministe...], es mucho más cutre. Cada año Exteriores convoca centenares de plazas para que estudiantes universitarios o recién graduados sean becarios [https://elpais.com/economia/2023-06-15/l...]en los servicios centrales del Ministerio o en las embajadas y consulados de España en el exterior. Solo el último verano se convocaron 379 puestos por todo el mundo. Muchos de los jóvenes se asoman al mundo de la relaciones internacionales por primera vez o aspiran a ser diplomáticos y lo hacen sin ningún tipo de ayuda o contraprestación económica. Ser becario en el Ministerio de Exteriores es un lujo que solo se pueden permitir las familias con los re