Al finalizar la Primera Guerra Mundial, comenzó la recuperación económica: el alza del precio de los alimentos y el aumento de la demanda de mano de obra favoreció la posición de los trabajadores que, unificados en diferentes agrupaciones, reclamaron mejores salarios.
Al finalizar la Primera Guerra Mundial, comenzó la recuperación económica: el alza del precio de los alimentos y el aumento de la demanda de mano de obra favoreció la posición de los trabajadores que, unificados en diferentes agrupaciones, reclamaron mejores salarios.