Nicole espera la ansiada llegada de sus invitados, los Grimaldi, con Carolina de Mónaco, Stéfano y la joven Estefanía, todo un plus de lujo y reconocimiento para su local. Mientras, sabe de la relación que su hijo mantiene con Eva y le advierte: esa mujer solo quiere utilizarle como ya hizo en el pasado con Manuel, su propio padre. Oliver comienza a dudar de Eva y le pide romper con su relación. Para Eva ha llegado el momento de cobrarse venganza, de la misma manera que Nicole lo hizo con su hijo, acabando con su vida. Manuel está muy dolido tras saber que Eva quedó embarazada en el pasado, y que perdió al bebé por los golpes del comisario.