Esther Pujol fue agredida sexualmente por un religioso cuando solo tenía 10 años. Ocurrió durante un campamento de verano cuando el párroco aprovechó que estaba enferma para atacarla mientras los demás niños estaban de excursión. "Recuerdo la sensación de estar delante de un monstruo, es como un miedo absolutamente paralizador", relata a Andrea Ropero en El Intermedio, donde explica que después le siguió "un vacío oscuro".