Después de su tradicional monólogo de pie en el plató nada más comenzar El Intermedio, El Gran Wyoming se traslada hasta la mesa para reencontrarse con Sandra Sabatés. "Estoy con el ego destrozado", confiesa Wyoming a su compañera, a la que le realiza una pregunta personal: "Por lo menos, tú no me negarás que soy el presentador más guapo de esta mesa".