En este 'poscas' siguen produciéndose milagros. Si en el anterior episodio lográbamos que Lázara andara, hoy hemos conseguido que Toni Acosta se abra un perfil en una app de ligar. Bueno, más bien que Sílvia Abril lo haga por ella. Las del Grupo han entrado en el mercado y se han cruzado con hombres que intentan escribir bien, con místicos, con bobos y con gente que no sabe ni hacer ni editar fotos. Por no hablar de las bios: algunos sois más pretenciosos que un académico de Princeton. Normal que Toni siga questioning y que se resista a los matches a diestro y siniestro... Al final, las apps de ligar son como ir al súper. O como un buffet: te puedes poner de todo, pero es fácil que te siente regular. ¡Siempre nos quedará la sauna!