Alonso ha matado al capataz de Bras de Cubas y ahora debe marcharse lejos de su alcance. En su huida, Ana cae en sus brazos cuando ésta intentaba escaparse de la hacienda de Bras, quien la tenía retenida contra su voluntad. Los muchachos huyen juntos y se adentran en la selva, pero sólo Alonso podrá seguir el camino hacia Asunción.