Telmo permanece escondido en casa de una amiga de su hijo Alex. Mientras, Mikel y Tina continúan la búsqueda del policía. Por otro lado, Lola regresa de su investigación en Valencia y Gerardo intenta que recupere la fe en Telmo que ella parece haber perdido.
Gerardo le comunica a Lola que Lucas será su nuevo compañero de trabajo. Ella se muestra muy afectada ya que no puede olvidar a Telmo, aparte de no soportar a Lucas por su prepotencia.
Lola sigue desaparecida, pero llega la noticia a la comisaría de la aparición de su coche. Charlie y Pope entran en el chalet para rescatarla y detener a Bonet y Campos. Mientras, Lola permanece atada de pies y manos en el interior de una ermita.
Paula, locutora de un programa radiofónico nocturno, recibe en antena amenazas de violación y muerte por parte de un oyente. Charlie y Pope, encargados del caso, sospechan de Andrés, ex marido de Paula.
Un toxicómano asesina a una mujer mientras ésta sacaba dinero en un cajero. Lo más extraño es que en la cartera de la fallecida no falta ni un solo céntimo y sin embargo en ella aparecen las huellas de Joaquín.
Silvia, una joven empleada en una funeraria, aparece asesinada en su cama. Charlie y Pope interrogan a Olga, su mejor amiga, y descubren, a través de sus tatuajes, que ambas lideraron una secta conocida como 'Las asesinas de Conil'.
Mikel ingresa en el hospital a causa de una paliza que recibe de manos de unos porteros de discoteca cuando salió en defensa de Naruna, un amigo nigeriano con el que estaba de marcha.
Cuatro cadáveres aparecen juntos en un locutorio telefónico y el caso es asignado a Vallejo y Santos, agentes de la Brigada. Santos, de origen colombiano, identifica a dos de los asesinados como 'muleros' encargados de introducir droga en España.
Elisa, una ex modelo, graba con cámara oculta una pelea clandestina con arma blanca. Al ver este asunto publicado en una revista sensacionalista, Gerardo decide iniciar una investigación.
Pope y Charlie investigan el hallazgo de los cadáveres de tres hombres con una numeración decreciente realizada en sus cuerpos. Dichas marcas, supuestamente, han sido hechas por el asesino.
Pope y Charlie prosiguen con el caso del travesti asesinado, cuyo cuerpo tiene heridas de mordeduras humanas. Por otro lado, Lucas y Lola investigan la muerte de una adolescente por consumo de éxtasis en una macrofiesta.
La policía investiga el asesinato de Alejandro, uno de los secuestradores de Andrea, una mujer perteneciente a una adinerada familia cuyo paradero sólo conoce ahora Sebastián, el cómplice de Alejandro.
Pope y Charlie acuden para evitar que un atracador huya de un entidad bancaria con el dinero del botín. El atracador, consciente de la presencia policial, apresa como rehén a una chica de origen asiático.