A los 34 años los titulares dicen "mujer astronauta", "cientifica que batalla contra el cáncer", "influencer de la ciencia", "genia". La vida de Sara García Alonso construye un relato demoledor: cómo una mujer joven de clase obrera, educada en la enseñanza pública, ha llegado a las más altas cotas de excelencia en un terreno en el que solo llegan los brillantes entre los brillantes.