En la serie Desafío en Himalaya Jesús promete a Jonathan -el novato mejor adaptado- que le acompañará en su próxima aventura. Jonathan estaba feliz con la idea, especialmente cuando supo que irían a la isla de Ambrym, en el archipiélago de Vanuatu, a 2000 kilómetros al este de Australia, en el Océano Pacífico. Pronto descubrirá que ésta es la expedición más peligrosa hasta la fecha: descender al interior incandescente de un volcán activo. Un volcán es el fenómeno geológico más letal del planeta. La amenaza constante de que una tonelada de lava caiga sobre su cabeza es el menor de los problemas a los que se enfrentan Jesús y Jonathan. Incluso en el mejor de los casos han de soportar nubes de ácido sulfúrico y ácido clorhídrico capaces de acabar con su vida en menos de diez minutos. Además, al mezclarse estos gases con las nubes se produce una lluvia ácida tan corrosiva como la lejía, que afecta a la piel, a los ojos, y que les obliga a completar su aventura en el plazo de una semana: más tiempo en un entorno tan hostil tendría consecuencias irreversibles para su salud.