"Excita más mirar que tocar". Así de tajante nos lo dicen algunos de los artistas que trabajan en el Bagdad de Barcelona, considerado el templo del sexo en directo de Europa. Algo más casero es el sexo que practica un matrimonio que hemos conocido en Galicia. "Nos gusta el sexo y que nos miren", nos dicen, aunque es ella la que practica con otros hombres y el marido lo graba todo con su cámara de vídeo. El mundo de las cabinas de los sex shop y los espectáculos de desnudos en las despedidas de solteros también viven la máxima de "sólo mirar, aquí no se toca". El sexo también ha llegado a las redes sociales que según algunos expertos se ha convertido "en el auténtico mundo de las pajas". "Sexo sin tocar", es un reportaje de Georgina Ferri.