Al recibir la llamada de Dantón, Belén se ve obligada a ocultar la presencia de Simón en su casa, al sospechar de la presencia de un hombre en su casa, Dantón manda a vigilar a Belén a través de su amigo Chucho. Belén se disculpa ante Simón por haberlo negado ya que la opción de reconocer su presencia ante su marido nunca estuvo en su pensamiento al tratar de evitarle y evitarse un problema con el celoso Dantón, tras aceptar prestarse a vigilar a Belén Chucho toca a su puerta para asegurarse de que esta se encuentra sola según pedimento de Dantón. A la mañana siguiente al empezar la rutina diaria de sus vidas las hermanas Pacheco se enfrentan a la soledad, Teresa olvidando por completo la ausencia de su esposo Chepo lo llama para que la acompañe a tomarse su primer café del día.