Nosotros somos bien nacidos; sobre todo, en contraposición a los malnacidos, que eso, ya ves tú, sí puede ponerse todo junto. Podríamos también ser más humildes, pero es que el decir popular no admite las medias tintas de ser normalnacidos o regunacidos. Nos quedamos en bien nacidos y ya está, y, para refrendarlo, te damos las gracias si, aun pudiendo no hacerlo, decides, mira tú por dónde, oírnos. Así que, en virtud de estas gracias tan bien dadas, te invitamos a que le des tú al play, porque… ¡Aquí hay dragones!