Hay una Mallorca turística atyravesada por miles de visitantes, pero la isla encierra tambien partes emocionantes y una de ellas es la Tramuntana, la zona rocosa del norte que guarda secretos hermosos como la localidad de Deiá, el caserío de Banyalbufar o la esótica cartuja de Valldemossa. Todo en esta parte tiene una acento extremecedor y épico, todo suena a grandeza de tiempos ya huidos. En el Plà, en el llano, Pollença representa lo contrario, el poderio de una agricultura floreciente. En Alcudia crece el buen arroz de la zona bajo el canto de dos paisanas que, rememorando tiempo, entonan las emocionantes tonadas de la plantá o de la recolección.