Norma vive con su hijo Jaime, de 30 años, con quien ha establecido un pacto: el joven no se casará, mientras ella viva. Sin embargo, conoce a Marta y se enamora. Pasado un tiempo, deciden casarse, pese a la oposición de Norma. En ese momento, la joven comenzará a sentir el odio de su suegra, el que podría llegar a comprometer su vida.