Lugares que Hablan nos va a embarcar por una aventura de 200 kilómetros, desde el nacimiento a la desembocadura del Río Bueno, desde el Lago Ranco al Océano Pacífico. Un trayecto que sorprende a cada paso por sus bellas postales, su increíble y esforzada gente, y por el arte que se esconde en este rincón único de nuestra geografía.