Lucía y Pablo asisten juntos a una cena en la que terminarán saliendo a flote secretos que pondrán en riesgo la estabilidad de la pareja. En medio de la salida, a la que también asiste María Cristina, la madre de Julia, se ventila el nombre de la expareja de Lucía, Mateo Zaragoza, a quien, coincidencialmente, Pablo ya ha señalado como uno de los culpables de la quiebra del Fondo Platinum.