Au lendemain de sa première exposition aux Arts décoratifs de Strasbourg, le corps d’une artiste, étoile montante de la scène artistique alsacienne, est retrouvé sans vie. L’enquête remonte jusqu’à un salarié de la Fondation qui a signalé un réseau de blanchiment d’argent impliquant notamment les œuvres de l’artiste. Le lanceur d’alerte est bientôt victime d’une vaste campagne de harcèlement en ligne, suite à un impair de Vanessa qui a rendu publique son identité. Peut-on vraiment protéger ces justiciers du quotidien quand le monde virtuel semble échapper à toute législation ?
El cuerpo de una artista emergente en la escena artística alsaciana aparece sin vida en la noche de su primera exposición en el Art Déco de Estrasburgo. La investigación deriva en un estudiante del propio museo, que denuncia que las obras de la artista están envueltas en una red de blanqueo de capitales. Pero el denunciante pronto se convierte en el blanco de una campaña de acoso masivo por Internet después de que Vanessa, sin querer, hiciese pública su identidad. ¿Se puede realmente proteger a estos héroes cotidianos cuando en el mundo virtual no existe protección legal alguna?